YO, TAMBIÉN PUEDO

 ¡todo lo puedo en Cristo que me fortalece! 

Filipenses 4:13 (RVC)

Algunos piensan que no pueden cambiar, marcar la diferencia, obedecer a Jesucristo e ir al cielo. 

Dios nos permite ser capaces en Su Hijo. Lo aprendo de Su Palabra. 

—> Sigue obediente a Jesucristo, con Él todo lo puedes. 

—Puedo cambiar, y no perder mi alma a causa del pecado. 

El Señor no se tarda para cumplir su promesa, como algunos piensan, sino que nos tiene paciencia y no quiere que ninguno se pierda, sino que todos se vuelvan a él. 

—2 Pedro 3:9 (RVC)

—Puedo ser un cristiano, Cristo murió por salvarnos, espera mi obediencia. 

Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo. Con esto podemos saber que lo conocemos: si obedecemos sus mandamientos. 

1 Juan 2:2–3 (RVC)

—Puedo entender la Biblia, estudiando con diligencia. 

No sean, pues, insensatos; procuren entender cuál es la voluntad del Señor. 

—Efesios 5:17 (RVC)

Procura con diligencia presentarte ante Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse y que usa bien la palabra de verdad. 

—2 Timoteo 2:15 (RVC)

—Puedo vencer la tentación humana. 

A ustedes no les ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero Dios es fiel y no permitirá que ustedes sean sometidos a una prueba más allá de lo que puedan resistir, sino que junto con la prueba les dará la salida, para que puedan sobrellevarla. 

—1 Corintios 10:13 (RVC)

—Puedo marcar la diferencia, siendo luz en Cristo. 

Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Tampoco se enciende una lámpara y se pone debajo de un cajón, sino sobre el candelero, para que alumbre a todos los que están en casa. De la misma manera, que la luz de ustedes alumbre delante de todos, para que todos vean sus buenas obras y glorifiquen a su Padre, que está en los cielos.

—Mateo 5:13–16 (RVC)

—Puedo ir al cielo, por el camino correcto y siendo fiel al Señor. 

Entren por la puerta estrecha, porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella. Pero estrecha es la puerta y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la encuentran. 

—Mateo 7:13–14 (RVC)

… Tú sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

—Apocalipsis 2:10 (RVC)

Puedo, si creo que puedo, empezando por ser un cristiano. 

—> El Señor me llama a salvación. 

El que crea y sea bautizado, se salvará; pero el que no crea, será condenado. 

Marcos 16:16 (RVC)

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