Un reino eterno
Por tanto, hermanos, procurad mucho más (por buenas obras) fortalecer vuestra vocación y elección, pues al hacerlo, jamás caeréis. De esta manera os será otorgada amplia entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. 2 Pedro 1:10–11 (RV 2020) Mantenerse firme en la fe de Cristo tiene su promesa: “no caer jamás”. Pedro nos enseña de qué manera se nos permite una amplia entrada al reino eterno, por la acción de nuestra fe (por buenas obras); es así como el Señor nos llevará en Su venida, Él es quien nos ayuda y preserva para Su reino eterno. Pero el Señor me ayudó y me dio fuerzas, para que por mí se llevara a cabo la predicación, y que todos los gentiles lo oyeran. Así fui librado de la boca del león. Y el Señor me librará de toda obra mala y me preservará para su reino celestial. A él sea gloria por los siglos de los siglos. Amén. 2 Timoteo 4:17–18 (RV 2020) El reino eterno abraza a los fieles del AT, al “Israel de Dios” (Gálatas 6:15-16), quienes fueron disting