Sin oscuridad en Su presencia
Este es el mensaje que hemos oído de él y os anunciamos: Dios es luz, y en él no hay ninguna oscuridad. Si decimos que tenemos comunión con él y andamos en oscuridad, mentimos y no practicamos la verdad. 1 Juan 1:5–6 (RV 2020) No existe oscuridad de pecado en Dios, ninguna. Pensar que Dios está complacido y nos aceptará mientras pecamos contra Él no tiene sentido, ¿verdad?. Al tener comunión con Dios nunca debemos andar en oscuridad (pecando), nos hacemos mentirosos al intentar forzar una relación con Él en esas tristes condiciones. Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais cuando estabais en vuestra ignorancia. Al contrario, así como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir, porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. 1 Pedro 1:14–16 (RV 2020) Su verdad nos revela que Dios es santo y que debemos ser santos para tener una relación verdadera con Él; y esto nos hace preguntarnos: ¿cómo estoy en Su pre