SÓLO EN CRISTO (II)

Si nosotros sufrimos, es para que ustedes reciban consolación y salvación; si somos consolados, es para que ustedes reciban consuelo y puedan soportar como nosotros cuando pasen por los mismos sufrimientos. 

2 Corintios 1:6 (RVC)

Los caminos de Dios son a menudo contrarios a nuestro pensamiento y entendimiento. Pero vivo confiado.

Porque en Él viviré aunque esté muerto, vivo creyendo sin morir eternamente. 

—> Yo creo sólo en mi Salvador. 

—Encontramos descanso bajo Su yugo. 

Vengan a mí todos ustedes, los agotados de tanto trabajar, que yo los haré descansar. Lleven mi yugo sobre ustedes, y aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón, y hallarán descanso para su alma; porque mi yugo es fácil, y mi carga es liviana.» 

—Mateo 11:28–30 (RVC)

—Pequeños, aunque engrandecidos. 

… les dijo: «Cualquiera que reciba a un niño así en mi nombre, me recibe a mí; y cualquiera que me recibe a mí, recibe al que me envió. Porque el más insignificante entre todos ustedes, es el más grande de ustedes.» 

—Lucas 9:48 (RVC)

—Somos últimos, siendo los primeros. 

Pero entre ustedes no debe ser así. Más bien, aquel de ustedes que quiera hacerse grande será su servidor, y aquel de ustedes que quiera ser el primero, será su esclavo. 

—Marcos 10:43–44 (RVC)

—Vemos las cosas que son invisibles. 

Por eso, no nos fijamos en las cosas que se ven, sino en las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas. 

—2 Corintios 4:18 (RVC)

—Conquistamos sometiéndonos a Dios. 

¿Acaso no saben ustedes que, si se someten a alguien para obedecerlo como esclavos, se hacen esclavos de aquel a quien obedecen, ya sea del pecado que lleva a la muerte, o de la obediencia que lleva a la justicia? 

—Romanos 6:16 (RVC)

—Exaltados siendo humildes siervos. 

El que sea más importante entre ustedes, sea siervo de todos. Porque el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido. 

—Mateo 23:11–12 (RVC)

Sólo en Cristo encuentro seguridad y confianza, aunque mucho sea contrario, cada día en su servicio. 

Tengo consuelo a través del sufrimiento, salvación en todas sus promesas. 

—> En Cristo vivo, en la fe que salva. 

Jesús le dijo: «Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?» 

Juan 11:25–26 (RVC)

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