MORADA DEL ESPÍRITU (1)

Pero ustedes no viven según las intenciones de la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios habita en ustedes. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él. Romanos 8:9 (RVC) Dios ha querido tener Su morada en nosotros. Promesa cumplida en Jesucristo. Siendo obedientes a Su llamado por el Evangelio, Él habita en nosotros. —> Dios está con nosotros, en nosotros. —Hace posible la comunión con Dios. Dios mío, ¡crea en mí un corazón limpio! ¡Renueva en mí un espíritu de rectitud! ¡No me despidas de tu presencia, ni quites de mí tu santo espíritu! —Salmo 51:10–11 (RVC) —Su Espíritu está con y en nosotros. Nadie ha visto jamás a Dios. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se perfecciona en nosotros. En esto sabemos que permanecemos en él, y él en nosotros: en que él nos ha dado de su Espíritu. —1 Juan 4:12–13 (RVC) —Dios habitando en nosotros. ¿Y qué acuerdo puede haber...