Humillados en Su presencia
Humillaos delante del Señor y él os exaltará.
Santiago 4:10 (RV 2020)
Vivir humilde es reconocer la absoluta santidad y justicia de Dios, mientras Él me guía cada día. Avanzar en mi vida espiritual debe ser bajo una condición de sumisa obediencia, porque me humillo reverente ante la santidad y justicia del Padre celestial.
Hombre, él te ha declarado lo que es bueno, lo que pide el Señor de ti: solamente hacer justicia, amar misericordia y humillarte ante tu Dios.
Miqueas 6:8 (RV 2020)
Sí, debemos vivir humillados ante Dios mientras practicamos la justicia y amamos la misericordia; porque todo esto espera Dios de cada uno que le ama. Cristo fue humilde, y nos dejó Su ejemplo de mansedumbre y sumisión a la voluntad del Padre.
Así que, vosotros sentid esto mismo que Cristo Jesús, quien, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, y tomó forma de siervo…
Filipenses 2:5–7 (RV 2020)
Humillarse y ser humilde para elevar oraciones ante Dios, así estar justificado en Su presencia. No una oración orgullosa y vana, sino buscando la compasión divina a causa de nuestra condición de pecado. Porque sólo Dios puede perdonar y ensalzarnos.
En cambio el recaudador de impuestos, que se mantenía a cierta distancia, ni siquiera se atrevía a levantar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho diciendo: «¡Oh Dios!, ten compasión de mí, que soy pecador». Os digo que el recaudador de impuestos descendió a su casa más justificado que el otro, porque cualquiera que se ensalza será humillado y el que se humilla será ensalzado.
Lucas 18:13–14 (RV 2020)
En el NT tenemos advertencias continuas de tener cuidado de no caer (1 Corintios 10:12), y se espera de los que son de Cristo sean santos y revestidos de toda humildad (Colosenses 3:12), humillado/a cada día ante Dios y humildes en poner a prueba nuestras obras.
El que se cree ser algo, aunque no es nada, a sí mismo se engaña. Así que, cada uno examine su propia conducta y entonces tendrá motivo de jactarse, pero solo respecto de sí mismo y no por otro; porque cada uno asumirá su propia responsabilidad.
Gálatas 6:3–5 (RV 2020)
Vivir humilde ante Dios es el mayor ejemplo que un/a cristiano/a puede obrar. Tanto los jóvenes y todos los cristianos en el cuerpo de Cristo, revestidos de humildad (1 Pedro 5:5–7).
Así que, deposita tu alma en las manos del Padre celestial, humilde y confiado/a cada día en Jesucristo. Recuerda que Dios permite Su Gracia al que se presenta ante Él humilde.
Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes.
Santiago 4:6 (RV 2020)
#losolivosiglesiadecristo
#losolivosidc
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por ingresar a nuestro blog, apreciamos tus aportes. Dios te bendiga!