Protección contra el pecado

¿Con qué limpiará el joven su camino? ¡Con guardar tu palabra! Con todo mi corazón te he buscado; no me dejes desviar de tus mandamientos. En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti. 

Salmo 119:9–11 (RV 2020)

La Palabra de Dios es de bendición para nuestras vidas. Por obedecer a sus preceptos, los pecados se limpian, a través de sus mandamientos, el corazón del joven se dirige a buscar y encontrar a Dios. ¿Deseas mantener limpio el camino de tu vida?, Dios provee Su Palabra para alcanzarlo. 

Al implantar profundamente la Palabra de Dios en tu corazón, de manera honesta y sincera, te protegerás del pecado. No debes menospreciar Su Palabra, pertenece a Dios, y Él te la da para guiarte en tu caminar diario de santidad; una vida agradable a Sus ojos. 

Confía en Él, construye tu fe sobre Su Palabra, y al mantenerte fiel a Sus mandamientos caminarás con Dios. Ama a Dios y déjate guiar por Él, así vencerás este mundo de maldad y pecado, con tu fe obediente en Jesucristo. 

Pues amar a Dios consiste en obedecer sus mandamientos; y sus mandamientos no son una carga, porque todo aquello que es nacido de Dios vence al mundo, y esta es la victoria que vence al mundo: nuestra fe. ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios? 

1 Juan 5:3–5 (RV 2020)

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